sábado, 6 de noviembre de 2010

Adictos a Internet

Hace unos días leía una noticia relacionada con la adicción a Internet, incluida dentro de las llamadas adicciones sociales. Las especialistas del centro que trata las socioadicciones, AIS en Barcelona, alertaban sobre los peligros de pasar muchas horas en Internet. En esta página podeís hacer un test para saber si sois adictos.
Desde que el uso de Internet se ha hecho, casi, imprescindible para la vida de muchos de nosotros, que de vez en cuando, se nos va alertando de los posibles ‘peligros’ que comporta pasarse horas y horas delante de la pantalla (en esta era de la pantallización). Creo que, como en todo, en la medida está el veneno. No puede negarse que Internet ha transformado muchas de las maneras de aprender, comunicarnos, informar, entretenernos, hacer vida social, comprar,…con sus ventajas y sus desventajas.
Cuando elegimos hacer una actividad, estamos quitando tiempo para hacer otra. A no ser, que seamos capaces de hacer varias actividades a la vez, cosa que implicaría que no podamos concentrarnos al 100% más que en una. Así, las horas que pasamos navegando por Internet, se las estamos quitando a otras actividades. Y es ahí dónde cabe la reflexión personal.

Dejando a un lado los graves problemas que puede suponer estar enganchado a los, por ejemplo, juegos online y centrándome en las relaciones sociales, personalmente, a pesar de la gente que dice haber encontrado el amor por Internet y que ve más a sus amigos online que en la vida real, todavía creo en las relaciones cara a cara. Somos seres sociales que necesitamos del contacto con los otros para identificarnos como personas. Todavía no hay nada que pueda reemplazar la magia que se produce cuando conoces a alguien y te das cuentas de que conectas. Diferentes procesos físicos, que muy difícilmente podrán suplir las máquinas (de momento), se ponen en marcha cuando interaccionamos. Esos primeros segundos que  hacen que nos hagamos una idea de cómo es el otro, la química del amor, la importancia del olfato a la hora de elegir pareja, el lenguaje no verbal,…

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