Aparte de un 'trabajo' relacionado con el inglés, que me salió por casualidad hace unos meses, ahora también estoy volviendo a dar clases particulares. Dado que todavía no he encontrado trabajo, la situación me obliga a sacar mis recursos. Mis alumnas son mis queridas sobrinas pequeñas, ya que se han cambiado a un colegio que desde pequeños, ya tienen la enseñanza en castellano, catalán e inglés ( y os aseguro que el nivel de inglés con el que acaban el colegio sus alumnos, es para quitarse el sombrero). No sé si tal y como pinta el panorama económico, sería mejor aprender chino o alemán, pero como el inglés sigue siendo el idioma con el que 'vas a todas partes', no les queda más remedio que ponerse en serio desde que empiezan el parvulario. Así que tres tardes a la semana, esperan a la English teacher, repasamos gramática, les ayudo a estudiar los exámenes (tienen evaluación continua), les hago algún juego para motivarlas y todo ello con grandes dosis de paciencia, psicología y sobretodo, sobretodo, mucho cariño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario!