Esta expresión que muchos utilizamos e incluso hemos sido actores directos de ella, siempre me ha resultado simpática. Me preguntaba qué culpa tenían los pobres pollos, así que busqué por Internet su significado. (Como todo lo que se encuentra por la red, no hagáis demasiado caso si no es de una fuente que dé credibilidad.) Pues bien, según lo que encontré, se dice "montar un pollo" ya que los pobres pollos tienen un comportamiento bastante caótico y desorganizado y por lo tanto, también se le puede atribuir a una persona cuando hace algo que no es apropiado. Bueno, más o menos es así. Lo curioso de la cuestión es lo siguiente. Esta mañana estaba en mi bar favorito, escribiendo, cuando ha entrado una pareja. Se ha sentado en la mesa que había junto a la mía y, dado que la música no la ponen muy fuerte, podía oír lo que se decían. Estaban discutiendo y él parecía muy enfadado y no para de reprocharle a ella que, textual, "me montas un pollo cada día". Lo ha repetido varias veces y aunque no es agradable ver como dos personas que se quieren, o al menos lo han hecho, discuten, me ha hecho pensar otra vez sobre esta expresión.
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