
La podemos encontrar en el mercado en una gran variedad, aunque no todas tienen el mismo gusto, pues muchas vienen de muy lejos y pierden las popiedades (lo que una de mis hermanas ha bautizado, para cachondearse de mi, como las vitaminas kilométricas). Así que es mejor consumirlas, com el resto de frutas y verduras, de sitios más cercanos y que no hayan pasado meses en cámaras frigoríficas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario!